Opciones pedagógicas

PIRÁMIDE DE APRENDIZAJE

 

Nuestro modelo pedagógico se expresa mediante la pirámide de aprendizaje, que representa de manera esquemática nuestros principios pedagógicos y modos de educar. En la cúspide situamos el modelo de las inteligencias múltiples. En un segundo nivel, podemos identificar la dimensión comunitaria y personalizadora del aprendizaje. En tercer lugar, tres modelos concretos por los que optamos: la cultura del pensamiento, la cultura de la creatividad y el aprendizaje y servicio/emprendimiento.

INTELIGENCIAS MÚLTIPLES Y ESPIRITUAL

Hoy sabemos que no todos aprendemos por igual.

El desarrollo de las inteligencias múltiples de cada alumna y alumno permitirá que llegue al mayor grado de aprendizaje, descubra sus dones personales y conecte con lo que pueda llegar a ser la pasión de su vida.

COMUNIDADES QUE APRENDEN

Queremos traspasar los límites del aula y del centro escolar para comprender las nuevas tendencias que fluyen en el entorno y el mundo. La escuela teresiana fomenta el sentido de comunidad, cohesionada, donde todos se vuelven aprendices: profesorado, familias y alumnado.

En el futuro, nuestro deseo es que nuestros niños y jóvenes sepan trabajar en equipo, por eso optamos por un modelo de aprendizaje cooperativo que potencie la riqueza de habilidades de cada uno puesta al servicio del bien común.

PERSONALIZACIÓN

La persona es el centro de nuestra misión. Cada uno es importante y válido por lo que es. Educar se convierte pues en la experiencia de que cada persona conecte con su interior, con sus potencialidades y limitaciones. De este modo podrá crecer en armonía, en relación a sí misma, con los demás, con el mundo y abierta a Dios.

CULTURA DEL PENSAMIENTO

La facultad de discurrir es la más noble y más importante del alma. En nuestro modelo pedagógico priorizamos enseñar a pensar a nuestro alumnado, conseguir que se conviertan en personas autónomas con destrezas para resolver los problemas y tomar decisiones.

Utilizamos diferentes estrategias para conseguir que el alumnado desarrolle un pensamiento reflexivo, profundo y crítico.

CULTURA DE CREATIVIDAD

La creatividad es fuente de enriquecimiento, generadora de cambio. La educación teresiana posibilita procesos de metacognición en los que la creatividad se erige como factor clave en la resolución de los “problemas” del día a día. Así, intentamos que nuestro alumnado se interrogue y contemple siempre nuevas opciones, a fin de generar soluciones ingeniosas.

Los proyectos interdisciplinares, el aprendizaje basado en problemas, la gamificación, el Design Thinking, las Flipped Classrooms (aulas invertidas), etc. favorecen estos procesos de investigación, exploración, codificación… hasta generar conocimiento y encontrar múltiples soluciones.

APRENDIZAJE Y SERVICIO, EMPRENDEDORES

La educación teresiana tiene como objetivo educar a ciudadanos comprometidos, capaces de transformar su entorno y generar un profundo cambio social. La clave principal se encuentra en que se aprende mediante la acción y el compromiso social, a través de metodologías como el ApS (Aprendizaje y Servicio) y otros proyectos que fomentan el emprendimiento social.